La agricultura ecológica valenciana por fin tiene un plan

Elaborado por los técnicos de la Consejería, se ha puesto al alcance de los labradores, ganaderos, distribuidores y transformadores, para contribuyan con propuestas y soluciones. En Julio estará redactado, y ya cuenta con un presupuesto inicial por 2016

La última semana de enero ha sido el escenario de una sucesión de buenas noticias agroecológicas en la Comunidad Valenciana. En primer lugar, el martes 26 la presentación de un borrador del I Pla de Producción Ecológica Valenciana 2016-2020. Y el domingo día 31, la culminación ha sido una novedad simbólica, pero a la vez palpable: la apertura de un mercado para los productos ecológicos y artesanales en la plaza del Ayuntamiento de la ciudad de Valencia, cuyo alcalde, Joan Ribó, es ingeniero agrónomo.

Las líneas prioritarias del plan

La propuesta para el I Plan Valenciano de la Producción Ecológica (2016-2020) tiene como líneas prioritarias el fomento de un consumo consciente, responsable y ecológico. Evidentemente la producción, transformación y comercialización de los alimentos ecológicos son otras de las prioridades para contribuir a la estructuración del sector.

Contribuir a la investigación, la innovación, la participativa, la formación, la divulgación y la difusión con el objetivo de mejorar el asesoramiento en materia de producción ecológica están también entre los principios básicos de este borrador, que también pretende facilitar y mejorar las condiciones para acceder a la certificación. Todo estará incluido dentro de las políticas transversales del gobierno valenciano.


El mayor valor de este plan es que la redacción final se hará después de un periodo de participación de seis meses en el que intervendrán los agentes del sector. Algo que implica un esfuerzo inusitado hasta ahora, por parte de la administración, de llevar a todos los rincones de la Comunidad el debate, e implicar a unos agricultores y ganaderos nada acostumbrados a que se escuche su voz, y también con una experiencia recelosa, que ofrece resistencia a la participación espontánea y confiada.


La confianza en el éxito de la participación se basa en la eficacia de les tres primeras reuniones mantenidas tras la presentación del Plan, en las que se desmenuzaron las fortalezas, las debilidades, las amenazas y las oportunidades de este sector.

                           

Uno de los mayores problemas con los que se enfrentan los agricultores y los ganaderos orgánicos es la falta de organizaciones propias.

                                

El objetivo de este Primer Plan, al que es casi seguro que seguirá un segundo después de 2020, es convertir el 6 por ciento de superficie eco presente en la Comunitat en un 20 por ciento, es decir la quinta parte de las tierras cultivadas. Y también duplicar la facturación de la producción ecológica presente, que se cifra en algo más de 200 millones de euros al año, y llegar a los 500. Ello se conseguirá mediante un programa de transición de agricultura convencional a agricultura eco, y el apoyo al consumo, la transformación y la distribución, así como la incorporación al campo de una juventud que tome el relevo de sus abuelos.



Etiquetas